EL ARPA TRADICIONAL DE DURANGO, DEL VESTIGIO A SU RESURGIMIENTO.
De los antecedentes más remotos que se tienen registrados en Durango referente a este instrumento, lo consignó el músico Alberto M. Alvarado en el periódico literario musical “La Lira” publicada en 1938 por la Sociedad Mutualista de Filarmónicos de Durango, señalando al respecto: “Desde el año de 1863 en que llegó a Durango el Prof. Dámaso Uriza, primer arpista que se conocía en la antigua Guadiana, (…) con su nuevo instrumento, (…) comenzó una era de relativo progreso artístico musical para Durango, pues comenzaron a formarse conjuntos…
Durante la transición del siglo XIX al XX, etapa de consolidación del arpa, los músicos duranguenses Alberto M. Alvarado, Arturo Lugo y Gerónimo Sida entre otros, valoraron en su justa dimensión a este instrumento de cuerdas, insertándola en sus orquestas que hicieron época en la entidad por su gran trabajo de composición e interpretación de música para salón.
En la época de la Revolución Mexicana era común ver algunas agrupaciones con arpa o solistas ambulantes que entonaban corridos y otros ritmos de la región.
Posteriormente, el arpa fue perdiendo popularidad al ser desplazada paulatinamente por los nuevas corrientes musicales del siglo XX. La participación de los incipientes medios electrónicos de comunicación influyeron de manera importante para que los músicos, sobre todo los más jóvenes, se interesaran por los nuevos géneros musicales difundidos en la época que incluía otra instrumentación.
En la sexta década del siglo XX, el arpa de Durango prácticamente se suprimió del movimiento musical de la región. La música de arpa y su técnica de ejecución quedó en manos de unos cuantos arpistas de avanzada edad, los cuales al ir desapareciendo, se llevaron consigo información importante, sobre todo lo referente al repertorio popular, ritmos y estilos de interpretación que evolucionaron en la región.
A partir del año 2005 se origina en Durango el proyecto denominado: 1ª Escuela de Arpa Tradicional “Celso Duarte”, con la finalidad de recuperar o reactivar el arpa e insertarla de
nuevo en nuestro ámbito artístico-cultural, acercándose con la mayor aproximación a sus características interpretativas que la distinguieron en la región, además de conocer y aprender los diferentes estilos y técnicas de ejecución desarrollados en otros países y de México, para generar una nueva propuesta musical.
De manera general, el proyecto de la 1ª Escuela de Arpa Tradicional “Celso Duarte” establece en sus actividades primordiales la enseñanza, la promoción y difusión del Arpa tradicional en los diferentes estilos desarrollados en Latinoamérica. Para el fortalecimiento de dichas actividades se ha diseñado el Programa de Estadías Arpísticas, donde participan de manera periódica maestros arpistas de primer nivel provenientes de otros países y de México.
CURSOS DE ARPA A TRAVÉS DEL PROGRAMA DE
ESTADÍAS ARPÍSTICAS
En la aplicación de dicho programa se invita periódicamente a maestros arpistas extranjeros de renombre para la realización de intercambios de orden artístico-cultural, con la finalidad de fortalecer el proceso de enseñanza del arpa y su promoción en la región.
Cada año Para se contempla la realización de por lo menos tres estadías arpísticas, con duración de dos a tres meses cada una de acuerdo a la disposición de los maestros invitados, los cuales deberán involucrarse de manera formal en actividades de enseñanza del arpa (cursos intensivos), promoción y difusión de su trabajo artístico, programación de conciertos y presentaciones en diferentes espacios culturales dentro y fuera del estado, además de conducir a los alumnos destacados en la realización de su producción discográfica.
FESTIVAL LATINOAMERICANO DE ARPA